Olvidadas. De la política, de la identidad e incluso del lenguaje. En los últimos años, las mujeres del mundo árabe han convertido el cine en una de sus mejores armas para combatir la tradición que las condenaba a vivir en un segundo plano. La lucha por el derecho a la educación de las mujeres, un trabajo digno y la igualdad jurídica protagonizan algunas de las producciones más importantes de la última década. Películas como ‘Persépolis’ o ‘Caramel’ son algunas de las historias que han retratado la reivindicación de los derechos de la mujer en el séptimo arte. Pero no las únicas. En el mundo árabe las mujeres han sido durante siglos hijas del silencio. Sin embargo, esta era ha llegado a su fin, gracias a producciones como las siguientes:
La bicicleta verde
“Una bici no es cosa de niñas, menos para niñas devotas y educadas que protegen su honor”. Esta frase pronunciada por una de las protagonistas de esta producción resume los retos a los que se enfrentan cada día miles de niñas en el mundo árabe. La protagonista de esta historia es una joven de 10 años que vive en una sociedad que prohíbe a las mujeres y niñas ir en bicicleta. El límite entre lo autorizado y lo prohibido, el querer ir más allá de la tradición y el empoderamiento de las mujeres desde que son pequeñas son algunos de los temas que trata esta producción dirigida por Haifaa Al-Mansour. La película fue ganadora de numerosos premios en festivales de cine en todo el mundo. Sin embargo, fue especial porque hasta entonces ninguna directora saudí había tenido la oportunidad de rodar una película de tales características en su propio país.
10 años y divorciada
El matrimonio infantil es sinónimo de desigualdad. En la actualidad, más de 12 millones de niñas menores de 18 años se ven obligadas a contraer matrimonio cada año, según los datos proporcionados por UNICEF. El matrimonio infantil, en general, es consecuencia de la pobreza, la desigualdad de género y la falta de protección de los derechos de la infancia. Las niñas se convierten en mercancía y se encuentran con una realidad que les niega el derecho a decidir y a ser felices. La película empieza con Nojoom, una niña de 10 años, protagonista de esta historia, entrando en una sala de justicia, mirando al juez directamente a los ojos y diciéndole las siguientes palabras: “quiero divorciarme”. Esta frase que, en cualquier país de Occidente sería pronunciada por una persona mayor de edad, en Yemen y otros países la dicen niñas a las que se les ha arrebatado el derecho a decidir. La producción está dirigida por Khadija al-Salami, quien se ha convertido en la primera mujer cineasta de Yemen, un país devastado por la guerra y en el que cada día las mujeres sufren las consecuencias de uno de los conflictos más crueles del siglo XXI.
La fuente de las mujeres
“Esta película destaca, desde un punto de vista crítico, pero sin perder el humor, la fuerza y las capacidades femeninas, y cómo el hermanamiento entre las mujeres puede hacer frente al machismo imperante. Es una rebelión contra lo establecido y un canto a la igualdad”, dice Meryem Hafidi, experta en relaciones internacionales, después de aclarar que “ha sido muy difícil elegir, ya que cada vez hay más producciones que hablan del empoderamiento femenino y de la supervivencia de las mujeres árabes en las sociedades retrogradas y patriarcales en las que viven”. Esta comedia — dirigida por Radu Mihaileanu – cuenta la historia de un grupo de mujeres que vive en una pequeña aldea en Oriente Medio, cuya tradición las obliga a buscar agua en una fuente situada en el alto de una montaña. Un relato sensible y único que nos hace reflexionar sobre el papel de las mujeres en determinadas sociedades árabes.
Much Loved
‘Much Loved’ es probablemente una de las películas más duras que he visto en los últimos meses. Este filme –coproducido entre Marruecos y Francia– aborda el problema de la prostitución en Marruecos. Entre las mujeres que se ven obligadas a ejercer la prostitución hay chicas jóvenes, incluidas menores, tal y como narra esta producción. Esta película cuenta la historia de Noha, Randa, Soukaina y Hilma, cuatro prostitutas que trabajan en Marrackech y que se convierten en víctimas de una sociedad que no las deja crecer como mujeres. ‘Much loved’ es una crítica a uno de los problemas más silenciados de la sociedad marroquí.
¿Y ahora adónde vamos?
Hayar Chetouan nos ha recomendado – entre otras películas – ‘¿Adónde vamos ahora?’, una producción libanesa que narra la historia de un grupo de mujeres cristianas y musulmanas que se unen para acabar con una serie de sucesos violentos en una pequeña aldea. “Antes, el país que más auge tenía cinematográficamente hablando era Egipto”, nos ha explicado. Sin embargo, en la actualidad, cada vez son más los estados que utilizan el cine como arma para reivindicar sus derechos. Esta producción — dirigida por la libanesa Nadine Labaki– es sinónimo de sororidad, un canto a la amistad inquebrantable entre culturas.